Este año he leído más que nunca. Los libros son una droga revitalizante que no te arruina. Los guardas sin necesidad de llevártelos de inmediato a las venas, pueden reposar años en las estanterías hasta que les encuentres el momento de abrirlos bajo la lámpara y aspirar el olor de sus páginas, de que te acompañen y sean parte de ti antes de devolverlos al mueble.
76 libros y
muchos relatos, he perdido la cuenta. 60 autores diferentes (relatos y libros
con firma colectiva aparte): 20 de USA, 10 ingleses, 8 españoles, 4 franceses,
2 irlandeses, 2 polacos, 2 alemanes, 2 austríacos, 2 italianos, 1 escocés, peruano, 1 mexicano, 1 argentino, 1 chino, 1
sudafricano, 1 húngaro, 1 belga y 1 checo.
En lo alto,
Scott Fitzgerald (Hermosos y malditos), justo por encima de Jonathan Coe (La
lluvia antes de caer) y Julian Barnes (El sentido de un final). Días de lectura
que se van, libros que llegarán.
No hay comentarios:
Publicar un comentario